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viernes, 28 de mayo de 2010

Como el oleaje


El nivel de sueño y pereza es proporcional al nivel de trabajo acumulado.

Debería estar haciendo informes como una loca pero no me apetecía modificar y rellenar los del trimestre pasado. Prefería la pureza de una hoja de Word nueva, limpia, sin olor a papel como cuando escribes con lápiz, pero casi igual de apetecible.

“Me siento en las rocas. Estoy un rato hasta encontrar la postura más cómoda entre piedras, tosca, cacas de perro y algas en proceso de secado que ha traído el mar. Luego pongo la barbilla en las rodillas cruzada de brazos y desconecto del ruido de coches que tengo a mi espalda. Miro la ola que viene y se va, se deshace entre las demás, en la inmensidad del océano para volver a aparecer quien sabe cuando. A esa ola le tiro a veces las cosas malas para que las diluya poco a poco. En otras ocasiones otra ola diferente (o quizá la misma) me trae cosas buenas, cosas que celebrar. Hay conversaciones que sólo he tenido con el mar. Como no creo en Dios tengo que hablar con alguien. Puedo ir al mar a desfogarme, a llorar, a gritar, a reír, a confesarme, a meditar. Haga lo que haga siempre está ahí. Con mi vaivén y con el suyo. Creo que nos entendemos a la perfección. Un día me despierta un rayito de sol en la cara, y enseguida abro la ventana para ventilar y oler y ver el mar. Entonces está movido, totalmente gris y enfurecido. En otras ocasiones, huele a tormenta, empieza el viento frío, a chispear… Pasas por la carretera y miras a la izquierda cuando te das cuenta que el mar esta de color plata, calmado y suave. Yo siempre he sido así, puede que últimamente más. Vengo y voy, estoy triste y alegre, me emociono o lloro de pena. Cada vez es con más intensidad y en intervalos de tiempo más cortos, como el tiempo que pasa desde una ola a la siguiente. En cuestión de segundos viene una ola y me hace lanzarme al vacío y cuando aun no estoy ni saltando llega la ola siguiente por detrás para nublarme la cabeza. ¿Cómo se cura este vaivén? ¿Es una locura permanente o transitoria? No quiero que el mar se pare pero quizá sí el oleaje que llevo dentro”






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