He entrado hoy en Google con la idea de buscar alguna de las leyes de Murphy que resumiera mejor mis últimos días, pero soy tan egoísta que las hubiera cogido todas.
Y es que parece que últimamente no doy una y no dan una conmigo porque sentirte tan identificada con tanta frase no puede ser bueno.
Para poneros un ejemplo de esta etapa os resumo mi día de hoy:
- Esta mañana he salido de casa con un camal del pantalón hacia fuera y otro hacia dentro. Lógicamente me he dado cuenta a media mañana. (Ley nº11)
- A medio día me he pillado la mano con la puerta, me he tropezado con un cable, se me ha caído una fresa 3 veces, los tomates unas 4 y me he empapado la camiseta cuando fregaba.
- Por la tarde en clase he llevado un resumen que llevaba pidiendo el profe dos semanas. Hoy no la ha pedido y a mi se me ha olvidado.
- Al salir he ido a la piscina. Me he desnudado en el vestuario y me he dado cuenta de que no llevaba el agua. Me he vestido, he vuelto a salir para buscar una máquina. No había. He entrado otra vez y cuando ya tenia el bañador puesto no he encontrado las gafas. Me he vuelto a vestir (puntualización: hoy llevaba camisa de esas de 3 botones en cada manga y tropecientos más en la pechera lazo incluido) y les he devuelto el ticket a los de la entrada con la promesa de volver mañana. Me han pedido los datos y ha aparecido en la pantalla una foto mía (ley nº16) con 17 años y pelo corto que preferiría borrar de mi mente y de la de todos los presentes (bochornazo…).
- He aparcado lejos de casa (ley nº18) me he cargado con el bolso, los apuntes escurridizos en fundas transparentes, la bolsa de deporte y una bolsa con ropa para reciclar. A mitad de camino (ni más cerca de casa ni más cerca del coche) la bolsa de la ropa se me ha roto y la he esparramado por toda la calle (ley nº6). La señora de la tienda de peces me ha ofrecido dos bolsas y me he puesto a recoger como una mendiga la ropa del suelo dejando todos mis bártulos en el suelo.
- No hay situación que no pueda empeorar.
- Si es malo, permanecerá.
- Si puede romperse, se caerá.
- Cuando no lleves prisa, la luz se pondrá verde en cuanto tu vehículo se haya detenido por completo.
- Todo puede complicarse más de lo que puedas creer.
- Siempre habrá alguien presente cuando cometas un error.
- Los aparcamientos aparecen cuando ya no los necesitas.
- Si una cosa no puede salir mal, acabará saliendo mal de todas formas.
- Si todo parece que sale bien, es evidente que se te ha pasado algo.
- Nadie está cuando lo necesitas.
- Si te vistes a oscuras y sales a la calle sin mirarte al espejo, estarás haciendo pasar un rato divertido a los transeúntes.
- Cualquier cosa que digas será mal interpretada.
- Los primeros kilos que se pierden son de aquellas zonas que hasta ahora han sido las únicas atractivas que tenías.
- La duración de un minuto depende del lado de la puerta del cuarto de baño en que te encuentres.
- Si quieres que algo te salga bien, no se lo digas a nadie.
- Nadie es tan feo como muestra su foto del DNI. La excepción eres tú.
- Siempre hay más ropa sucia que limpia.
- Si aparcas el coche lejos, encontrarás tres plazas de aparcamiento justo delante de la entrada.
- Los amigos van y vienen. Los enemigos se acumulan.
- Nadie está atento a lo que dices hasta que metes la pata.
- Todo comportamiento puede ser criticado.
- Todas cuanto necesitas está siempre debajo de un montón de cosas inútiles.
- Si das paso a otro coche, acabará por quitarte el aparcamiento.
- Los gastos crecen hasta alcanzar los ingresos.
- Cuando creas que ya nada puede ir peor, te darás cuenta de que tienes poca imaginación.
- Si necesitas parar unos segundos el coche para buscar algo en la guantera, encontrarás todos los semáforos en verde.
- El lugar de trabajo siempre está menos ordenado que la última vez.
Y por último y en resumen de los resúmenes:
- Las leyes de Murphy pueden fallar, pero nunca fallan.